Si no estás de acuerdo con la 2ª modificación del proyecto de centro comercial de Antonio López, que lo convierte en un centro comercial mastodóntico, sin ningún respeto al entorno, robando espacio público y dotacional, y propiciando un modelo de centro comercial de carretera en el barrio, basado en la movilidad en coche y dinamitador del comercio local, en lugar de quedarte parado puedes hacer lo siguiente:

ALEGACIONES PLAZA RÍO 2

Presenta este modelo sencillo de alegación en cualquier registro municipal (la Junta de Distrito, la Oficina de la calle Hierro, etc..). Cuantas más alegaciones individuales se presenten más posibilidades habrá de un replanteamiento del proyecto:

Alegación individual al proyecto de Plaza Río 2

Bájate la alegación, fírmala y entragala en registro. Las asociaciones de vecinos de Usera y Arganzuela presentarán en los próximos días, de manera unánime y coordinada con la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos, alegaciones más elaboradas técnicamente en los próximos días con la ayuda y participación de arquitectos de reconocido prestigio, contrarios a este modelo obsoleto de desarrollo urbano y comercial.

Una vez firmes y entregues estas alegaciones, en el plazo de unas semanas o meses te llegará una respuesta oficial a las mismas. Aunque no sea positiva, el hecho de que las presentes ahora en plazo puede ayudar mucho a que el proyecto se frene o se replantee en términos más razonables para los barrios de Usera y Arganzuela, así como para todo Madrid.

FIRMAS ONLINE

Además puedes colaborar a esta campaña firmando a través de change.org:

Las asociaciones vecinales Nudo Sur, Nuevo Legazpi y Pasillo Verde Imperial, pedimos tu firma con el fin de protestar contra el proyecto del Centro Comercial Plaza Río 2, en la calle Antonio López 109 y 111 de la ciudad de Madrid. 

El proyecto se encuentra ahora mismo en fase de consulta pública. Queremos utilizar las firmas para exigir al Ayuntamiento que respete la opinión de la ciudadanía y los propios planes municipales de desarrollo para la zona.

Estas son las razones por las que nos oponemos a la propuesta actual:

1) Se quiere construir un centro comercial de estética anticuada, que tapona por completo la relación entre la ciudad y que sigue fielmente el modelo que se puede visitar en las periferias de las ciudades, asociado a nudos de autopista y grandes superficies asfaltadas destinadas a aparcamiento.

2) En esa parcela debería ir uno o varios edificios que tengan en cuenta la presencia del Manzanares, del parque Madrid Río y Matadero con una necesaria transparencia a través de los edificios y una suficiente conexión entre las orillas fluviales y los barrios del interior en el distrito de Usera.

Ese fue el compromiso que adquirió el Ayuntamiento con la ciudadanía de Madrid en los dos planes que redactó con el objetivo de velar por el mejor desarrollo de toda la zona: el Plan Especial Río Manzanares y el Plan de Renovación Urbana del Entorno del Río Manzanares (ver vínculos más abajo).

Según pregonaban los gobernantes municipales, la gran obra que supuso Madrid Río era la demostración de una nueva forma de hacer la ciudad, en la que el cuidado del medioambiente y el paisaje urbano primaban sobre otros intereses y dónde el espacio público adquiría una importancia inédita para la ciudad.

A cambio del gran coste en recursos y molestias que supuso la construcción de los túneles de la M-30, el Ayuntamiento ofreció a sus ciudadanos un modelo de arquitectura digna, en consonancia con un paisaje urbano armonioso y abierto, y con espacios público de calidad como Madrid Río y Matadero.

El incumplimiento de este acuerdo tácito mediante la construcción de semejante mamotreto constituye una estafa para la ciudadanía madrileña.

3) Nos oponemos al “centro comercial de periferia” que se pretende edificar. Es un modelo pensado para un acceso casi exclusivo en automóvil, por lo que prevé 1.700 plazas de aparcamiento bajo rasante, que van a acentuar los problemas de tráfico, ruido y contaminación de la zona. Constituye una propuesta impensable en cualquier ciudad culta de Europa.

4) Pensamos que la aparición de un centro de estas características puede ser demoledor para el comercio local, que en los barrios de cualquier distrito es fundamental para mantener la cohesión social y urbana. La opinión de los comerciantes de la zona debe ser especialmente tenida en cuenta si no se quiere perjudicar gravemente la vida de los vecinos y la economía de los pequeños negocios.

5) El proyecto en apariencia atenta flagrantemente contra la filosofía del convenio que obligaba a ceder el solar junto a la calle Eugenio Caxés para espacio público. En la práctica esta parcela se va a convertir en un jardín antesala del centro comercial al servicio de éste, y no en un espacio libre para uso y disfrute de la ciudadanía.

6) La planificación de Madrid Río y sus alrededores no puede dejarse al albur de los intereses particulares de cualquier promotor. Parece que la ciudad está en venta, a disposición del mejor postor.  Muy al contrario, cualquier acción urbana debe basarse en el diálogo con los habitantes, los usuarios, los comerciantes… de los barrios y los distritos. Ya hay demasiados ejemplos que indican justamente lo opuesto: la operación Mahou Calderón, la próxima privatización del Mercado de Frutas y Verduras o este lamentable Centro Comercial.

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