Los vecinos de Arganzuela instan a Rajoy y a Ana Botella a no rendirse a los intereses de las operadoras y aprobar normas que protejan la salud de la población

Este domingo 29 de mayo, entre las 12 y 15 horas, decenas de familias y vecinos, así como representantes de las asociaciones, colectivos y partidos políticos de Arganzuela, han celebrado una fiesta protesta contra la instalación de antenas de telefonía móvil camufladas en las cercanías de los colegios Plácido Domingo y Tirso de Molina.

El acto ha tenido lugar en la zona verde de la calle Ónice 3-5, enfrente de la azotea que la inmobiliaria Larcovi ha alquilado a Vodafone y Movistar. Estas operadoras han solicitado al Ayuntamiento de Madrid permiso para dicha instalación.

Los representantes de la Plataforma de Afectados por las Antenas de Larcovi han informado que, a fecha de hoy, el Consistorio todavía no ha concedido ese permiso, pero que puede hacerlo en cualquier momento, tal como les ha traslado el abogado Agustín Bocos, asesor de la Plataforma Estatal contra la Contaminación Electromagnética y representante legal de los vecinos en este expediente.

Las familias de Arganzuela están especialmente preocupadas por la proximidad de las vacaciones de verano. Temen que el Ayuntamiento y las operadoras utilicen ese período para instalar las antenas sin oposición vecinal.

En el acto se ha señalado que el problema de fondo sigue siendo la connivencia existente entre las autoridades y las empresas de telefonía. Es un escándalo que nuestra legislación permita someter a la ciudadanía a unos niveles de contaminación electromagnética peligrosos para la salud, tal como han señalado repetidamente el Parlamento Europeo (en 2008 y 2009), la Agencia Europea del Medio Ambiente (2007) y el Consejo de Europa (mayo de 2011).

En este sentido, los vecinos han hecho un llamamiento al gobierno de la nación y a la alcaldesa de Madrid para que aprueben nuevas normas que reduzcan sustancialmente los actuales límites de exposición. Es igualmente necesario proteger lugares sensibles como los colegios dada la especial vulnerabilidad de los niños a los efectos nocivos de las ondas electromagnéticas.

El carácter reivindicativo del acto se ha combinado con música infantil, talleres de papiroflexia y pintura, y un mercadillo benéfico en el que los asistentes han intercambiado libros y juguetes.

Desde que empezaron su lucha contra la instalación de las antenas en agosto de 2010 los vecinos han entregado a las autoridades más 2000 firmas y 500 alegaciones. Se han reunido con el Defensor del Menor, Ana Botella y la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones del Ministerio de Industria. En los próximos días mandarán a la alcaldesa de Madrid y a los presidentes de Vodafone y Telefónica las últimas 500 firmas recopiladas a través de la web Actuable.

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