Una plaza inhóspita reina en el epicentro del barrio madrileño de Legazpi. Abandonada y sucia, descansa en un letargo que ya dura más de cuatro años. Los proyectos que se presentaron están paralizados y no tienen fecha de reanudación. ¿La razón? No hay presupuesto. Los vecinos se han quedado sin la prometida remodelación. No habrá, de momento, intercambiador de transporte ni tampoco reforma alguna en el antiguo Mercado de Frutas y Verduras, lo que condena a la propia plaza a la más absoluta desolación. Además, la rotonda de dicho epicentro está coronada desde hace años con un Pegaso alado empapelado con una lona de plástico gris, lo que ha servido para rebautizar el lugar como la plaza de la Momia.
Palabra clave:plaza
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